9 de febrero de 2014

EXÓTICOS PORTAVELAS

Cuando decidí guardar el primer frasco de cristal no fui consciente de todos las frascos que iban a empezar a acumular, ni de todas las posibilidades que podían ofrecerme.
Tuve que hacer un hueco especial para ellos en un rincón de mi cocina. Así que, mientras no les doy uso, me resultan gratamente decorativos. También es cierto que algunos de ellos he empezado a rellenarlos con pastas y legumbres varias.


Inspirándome en la entrada anterior decidí utilizar alguno de ellos para dar forma a una idea que me rondaba la cabeza. Eché paciencia y un pulso a prueba de bombas pero el resultado es gratificante sobre todo cuando compruebas que a los demás les parecen tan fabulosos como a mí.
Para pintar sobre cristal necesitareis una pintura especial. Yo utilicé laca de bombillas y un perfilador dorado.

En este caso el bote que elegimos lo hemos pintando utilizando la técnica del esponjado. Aplicamos la pintura empapando un algodón y dejamos que se seque. Es rápido así que no tendréis que esperar mucho. Luego con el perfilador vamos marcando el diseño final.




Y este es el resultado...


... esperamos que os guste

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